A comienzos del siglo XIX la Armada Nacional carecía de un escalafón propio de Sanidad. Se subordinaba a la mejor constituida Sanidad Militar y por lo tanto a depender del Cirujano Mayor de Ejército.

Según los historiadores el cirujano Bernardo Campbell fue el primer médico embarcado, aunque queda para el Dr. Manuel Antonio Casal el mérito de haber sido el primero en desempeñarse en la Fragata Hércules, en la que el Almirante Guillermo Brown izó su insignia.
En las guerras de la Independencia, los buques de la Armada contarían con apenas tres cajas de cirugía y tres de elementos clínicos. La evacuación de heridos exigía rutas de transporte hacia la retaguardia, estableciendo hospitales donde se recibirían los mismos.
Rara vez los navíos se alejaban demasiado de los puertos. Por el contrario, en los cruceros atlánticos, la posibilidad de desembarco de los heridos era prácticamente nula.
En las campañas del Plata, los heridos se evacuaban al Hospital General de Hombres. Como dicho hospital resultó insuficiente para la cantidad de heridos, se instalaron durante 1826 anexos en el Convento de la Merced y Convento de San Francisco.
La patología traumática ocupaba hasta un 20 % de los internados, por los heridos de guerra.
El 8 de Mayo de 1865 se promulgó el decreto de organización del Cuerpo Médico para la guerra con el Paraguay, donde tuvo una notable actuación el patriarca de la Sanidad Naval, el “Dr. Pedro Mallo”.
El Dr. Pedro Mallo había nacido en Buenos Aires en 1837. Se graduó como Doctor en Medicina con la tesis “algo sobre la enajenación mental” Tuvo una destacada actuación en la epidemia de Fiebre Amarilla de 1871, donde enfermaron unos 50.000 pobladores, la cuarta parte de la población estable, y donde fallecieron alrededor de 14.000. Creador de la camilla de campaña que utilizó el Ejército en su época y la primera mochila botiquín.
Escribió sobre Sanidad en Combate, Higiene en los buques de guerra, Enfermeros en la Armada y material sanitario en los buques, entre otros.
El 21 de abril de 1879 por decreto del Presidente Nicolás Avellaneda y siendo su Ministro de Marina el General Luis María Campos, se creó el empleo de Cirujano General de la Armada como Jefe del Personal Médico del Arma (con jerarquía de Teniente Coronel), siendo designado el Dr. Pedro Mallo para tal función. El 31 de Diciembre de 1880 otro decreto estableció los deberes y atribuciones del nuevo cargo de Cirujano Mayor de la Armada, como Director del Cuerpo de Sanidad Naval.

El Dr. Pedro Mallo ascendió a Cirujano Mayor, equivalente a Capitán de Navío. El 1° de Abril de 1882 el Poder Ejecutivo decretó que en lo sucesivo el Cuerpo de Sanidad de la Armada dependiera del Ministerio de Guerra y Marina. Dicho decreto estableció además el orden jerárquico del Cuerpo Médico: Pedro Mallo como Cirujano Mayor, Mario Mason y Benjamín Araoz como cirujanos principales y luego venían los cirujanos de primera y segunda clase. El 20 de Junio de 1885 el Cuerpo Médico pasó a depender del Estado Mayor General. Fue el 15 de Octubre de 1.888, bajo la presidencia de Juarez Celman, que se organizó en forma definitiva la estructura de la Sanidad del Ejército y de la Armada, a través de la ley 2.377 Pedro Mallo, académico de número de la Facultad de Medicina, fue ese año designado Inspector General de la Armada y se retiró de la actividad militar en 1896, luego de casi 31 años de Servicio. Este hombre de la Armada, merecedor de numerosos honores, brillante como historiador, militar y catedrático, a quien con orgullo honramos cada día con nuestro trabajo, falleció en su ciudad natal en 1899, luego de ser designado Vicedecano de la Facultad de Medicina.